Torrecillas de la Tiesa: La Web de los Torrecillanos

¡Vaya memoria!. ¡Acordarse de los nombres de los trozos de la Dehesa Boyal: Las de la Hoja.
Lote Nuevo. La Centella. El Milano. La hoja. Arroyo Caballo. Vereda de El Pozito. La Solana. El Fontarrón Grande, El Fontarrón Chico, Las del Cementerio, Las del Cancho del Almuerzo, Las del Camino, El Majadal, Las de La-Cañá-La-Pila.

Realmente, yo sólo recuerdo que llegaron a formar parte de la vida y las economías de muchos. Aunque no fuera gran cosa, era una ayuda con la que ya contaban las familias para arreglar sus déficits o encontrar un alivio entre tantas estrecheces y apuros en los que se vivía.

A los que les tocó labrar su haza no habrán olvidado nunca estos cachos.

Parece que ahora, en la mayoría de los pueblos, los ayuntamientos dan otro uso a las dehesas boyales. Unos las sacan a subasta, otros las convierten en regadío, otros las utilizan para edificios de interés público.

Según el Diccionario de la Real Academia Española boyal procede de buey: 'Perteneciente o relativo al ganado vacuno. Se dice comúnmente de las dehesas o prados comunales donde el vecindario de un pueblo suelta o apacienta sus ganados, aunque estos no sean vacunos'. Dehesa procede del latín defensa, defendida, acotada, siendo la ' tierra generalmente acotada y por lo común destinada a pastos'.

Parece que hoy en día, con lo que menos tiene que ver una dehesa boyal es con los bueyes.

'Fueron por mucho tiempo el sostén de la población rural pobre sin que por ello, dada su importancia económica y social, mereciese una regulación especial.
El concepto más claro nos lo da el "Memorial" que, el Honrado Concejo de La Mesta dirigió al Rey, en 1764, donde se dice "dehesa es suelo y coto para pastos...... ningún sitio y suelo ha podido romperse ni labrarse.
Su origen remoto puede encontrarse en el privilegio que el Rey Sabio estableció concediendo una superficie de tres aranzadas de tierra por yugo de bueyes a los labradores pobres, destinado al ganado de todos.'(página 271 del libro: LAS COMUNIDADES CASTELLANAS Y LA VILLA Y TIERRA ANTIGUA DE CUÉLLAR, Siglos XIII - XVI, del autor ESTEBAN CORRAL GARCÍA, Doctor en Derecho y Oficial Mayor del Ayuntamiento de Salamanca., Editado en Salamanca, 1978.)

Pero sigue siendo una propiedad común que proporciona y seguirá proporcionando muy buenos usos y beneficios para la comunidad.