Lucas, me acabas de interrumpir otro descubrimiento que estaba haciendo sobre mis (nuestros) antepasados del siglo XVI. Con esos gritos de '¡¡¡EN DEFENSA DE MI HONOR!!!', uno se desconcentra y pierde el hilo.
'Honor'. Lo dices justo ahora que estábamos poniendo en entredicho (Carmen y yo contra Narciso) la oportunidad de esta palabra. Lo cual hace suponer que vas a querer adherirte a la postura de los que la defienden.
Podríamos formar dos equipos, los del 'honor si' (también conocidos como los 'honorables') y los del 'honor no' (o el equipo del 'deshonor' ) . Por el simple placer de discutir. A ver hasta donde llegábamos. Luego acabamos haciendo una encuesta para comprobar quien ha ganado.
Si embargo, después de leer el exhaustivo artículo de la whikipedia sobre la palabreja, he comprobado que efectivamente el tema tenía miga, y las discusiones se podían alargar indefinidamente de no hacer las aclaraciones previas sobre lo que se habla. Y sobre todo habiendo tanta confusión, como hay, entre los conceptos honor, honra y honradez. La discusión se podría posponer a la lectura del mencionado artículo (http://es.wikipedia.org/wiki/C%C3%B3digo_de_Honor).
A lo de la cena se llegó mediante un proceso evolutivo. Yo tampoco quería cena, pero el consenso de la mayoría y las múltiples interrupciones y marchas atrás y dilaciones decidieron esta solución: Cena sin renunciar a la cata de vinos. Si el día 9 fueron los Riojas de Juan, otro día serán los reservas de La Tiesa de Lucas, y más adelante caerán los de Sabino, y los de Contreras también.
¡Ah! Y lo del descubrimiento... Es el siguiente: Viendo los apellidos de mis bisabuelos descubro que tengo 3 apellidos 'Rubio', 2 'García', 1 'Jiménez', 1 'Murillo' 1 'Serrano', 1 'Díaz', 1 'Crehuet', 1 'Pizarro', 1 'Moreno', 1 'Gil', y otros más que no me acuerdo. Me imagino que cualquiera que haga este mismo ejercicio le pasará algo parecido. Puede encontrar ascendencia francesa, portuguesa, o de otros países, pero lo que yo no me hubiera imaginado es que pudiéramos tener ascendencia inca. Estaba leyendo, cuando Lucas me interrumpió, que el tal Francisco de Pizarro y Pizarro, hijo de Francisca Pizarro Huaylas, hija a su vez del conquistador del Perú y de la princesa indígena Inés Huaylas Yupanqui, y de Hernando Pizarro, hermano del mismo conquistador del Perú, que, por tanto, casó con su sobrina carnal para mantener unida la fortuna del clan familiar, era dueño de media Torrecillas: Labrados de Tozo, Boticojo, Atalaya de Francisco de Monroy, Boticojo de herederos, Palazuelo... Y para colmo, Diego Pizarro compró el pueblo (sólo lo que entonces era el término: casas, cercas, dehesa boyal y ejido; no incluían los latifudios) , con sus aldeanos y sus siervos, teniéndolos bajo su dominio durante doscientos años.
Averigua ahora a que 'honor' nos agarramos: ¿al de nuestro pasado servil, al de nuestro gran jefe conquistador, al de la princesa inca, al del soldado francés invasor...?
Por ahí iba. Y ahí me quedé.
Saludos.
